Un elemento cada vez más indispensable en nuestra cocina es la campana extractora. Gracias a ella mantendrás tu cocina limpia de grasas, humos y otros elementos nocivos. Sacar de tu casa los humos grasientos que se generan al cocinar es la misión principal de este electrodoméstico del que existe una amplia gama de modelos. ¿Cuál será el que se adecue mejor a mis necesidades? Debes tener en cuenta estos aspectos clave.
Una función muy importante a tener en cuenta es la capacidad de evacuación, que es realmente la principal misión de este electrodoméstico. Es necesario conocer su capacidad de extracción ya que si no es suficiente para nuestra cocina su trabajo será en balde. Debemos estimar la necesidad real de extracción, que obtendremos multiplicando primero los metros cuadrados de suelo de la cocina por la altura de la misma. El número resultante lo multiplicamos por 12 (revoluciones por hora del motor) y obtendremos una cifra en metros cúbicos. Tendremos en cuenta esta cifra a la hora de comprar nuestra campana extractora y conseguiremos una cocina libre de humo.
El tipo de instalación será otro determinante para la elección ya que pueden ser encastrables o colocadas bajo un mueble, o independientes sobre la pared. Diseños elegantes en aluminio las hacen muy atractivas. Si montamos una encastrable las vamos a encontrar plegables, que ocupan poco espacio, pero requieren de un mayor mantenimiento, o de una pieza. Debes tener en cuenta la altura entre los fogones y la campaña extractora ya que la seguridad es muy importante. Elige una campana que sea fácil de limpiar, las metálicas lo son, y que los filtros tengan fácil acceso para su limpieza para que siempre estén limpios de grasa, ya que esta es una de las principales causas de incendio en la cocina.
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